Además del fruit cake, otro postre navideño que no pueden faltar es el tronco de Navidad. De origen europeo, se caracteriza por un suave bizcocho con un relleno cremoso, aunque el truco está en saber enrollarlo. Para que te quede perfecto, te pasamos la recta.
¿Te has preguntado por qué un pastel en forma de tronco está tan ligado a la Navidad? Este postre nació en Europa como representación de una antigua tradición nórdica: la quema del tronco de Yule.
Esta formaba parte de las celebraciones del solsticio de invierno y consistía en quemar un gran tronco en la chimenea. Más allá de proporcionar calor, simbolizaba la purificación, renovación y el regreso del sol, además de traer buena suerte y proteger el hogar.
Sin embargo, esta práctica fue disminuyendo con el tiempo, en especial cuando las chimeneas comenzaron a desaparecer. Fue entonces cuando surgió el pastel que en francés lleva el nombre de bûche de Noël, decorado para parecer un leño listo para la chimenea.
De esta forma, se mantenía el símbolo y lo que representaba, sin necesidad de fuego. Este postre se compone de un bizcocho genovés relleno de crema y enrollado, con una cobertura de ganache.
Pese a ser un postre sencillo, tiene un grado de dificultad, pues se necesita un bizcocho lo suficientemente flexible para que se enrolle sin romperse. Aquí te damos la mejor receta de tronco navideño y los tips para que quede perfecto.
Ingredientes:
Para el bizcocho:
Para el relleno:
Para la cobertura:
Preparación:
1. Precalienta el horno a 180 °C. En un tazón, tamiza la harina con la cocoa, polvo para hornear y sal. Por otro lado, en una taza, mezcla la leche con el aceite con ayuda de un tenedor.
2. En otro recipiente amplio, bate los huevos con el azúcar hasta que estén esponjosos, pálidos y hayan triplicado su volumen. Agrega la vainilla y bate.
3. Incorpora los ingredientes secos en dos partes. Hazlo de forma envolvente para no bajar el aire de los huevos
4. Integra la leche con el aceite en forma de hilo y mezcla nuevamente de forma envolvente.
5. Forra una charola rectangular de 30 x 40 centímetros con papel encerado y engrasa ligeramente.
6. Vierte la mezcla y extiéndela con una espátula para emparejar la masa.
7. Lleva al horno y cocina por 10 o 12 minutos, hasta que, al presionar ligeramente el centro, regrese suavemente. Ojo: es importante no exceder el tiempo de horneado o el bizcocho podría romperse al enrollarlo.
8. Saca el bizcocho del horno y cúbrelo con papel encerado. Con cuidado, voltéalo y colócalo sobre una superficie plana.
9. Retira el papel encerado con el que horneaste el bizcocho y enrolla el pan con ayuda del papel nuevo. Esto ayudará a “educarlo” y que mantenga la forma cuando sea el armado final. Sin desenrollarlo, déjalo enfriar por 30 minutos.
10. Para el relleno: bate la crema para batir con el azúcar glas. Comienza a velocidad baja y, conforme aumente el volumen, aumenta la velocidad. Bate hasta tener picos suaves. Tip: mete la crema al congelador 30 o 45 minutos antes de usarla.
11. Incorpora el chocolate derretido tibio, en forma de hilo, y bate a velocidad baja para integrarlo. Añade la vainilla y mezcla. Tip: derrite el chocolate en el microondas, en intervalos de 30 segundos, mezclando entre cada uno. Otra opción es hacerlo a baño María, cuidando que el agua no entre al chocolate.
12. Cubre la crema de chocolate con plástico de cocina y refrigera por 15 minutos para que tenga una mayor consistencia.
13. Al momento de rellenar el bizcocho, desenróllalo con cuidado. Unta la crema de chocolate dejando un espacio sin crema en uno de los bordes de un centímetro.
14. Enrolla nuevamente el tronco, retirando el papel encerado. Hazlo presionando ligeramente, pero cuidando no aplastar el bizcocho ni sacarle el relleno.
15. Envuelve el pastel en papel film y refrigéralo por una hora para que se asiente y mantenga su firmeza.
16. Para hacer la ganache que lo cubrirá: calienta la crema para batir en una ollita. Cuando vaya a empezar a hervir, apaga el fuego.
17. Coloca el chocolate en un recipiente resistente al calor y vierte la crema. Deja reposar por dos minutos.
18. Con un batidor de globo, mezcla hasta que el chocolate se derrita. Agrega la mantequilla y bate, para que tenga más brillo.
19. Deja enfriar la ganache hasta que tenga una textura untable. Saca el tronco del refrigerador y cúbrelo con el chocolate. Puedes hacerlo con una espátula y darle textura con un tenedor. Otra opción es poner la ganache en una manga pastelera y usando una duya de estrella abierta, hacer líneas a lo largo del tronco para darle una apariencia más natural.
20. Para hacerlo más atractivo, decora tu tronco de Navidad con frutos rojos y espolvoréalo con azúcar glas para dar una apariencia nevada.
Disfruta este postre navideño en la cena de Navidad, Año Nuevo o cualquier reunión con tu familia y amigos.

