OSLO.– La líder opositora venezolana y ganadora del Nobel de la Paz, María Corina Machado, ya no se encuentra en Oslo, anunció este miércoles un cercano colaborador, Pedro Urruchurtu, quien no precisó su nuevo destino.
Machado se fracturó una vértebra la semana pasada al salir de Venezuela, donde vivía oculta desde agosto de 2024.
“Se encuentra bien y durante estos días está atendiendo citas médicas con un especialista en función de su pronta y total recuperación”, indicó Urruchurtu en su cuenta de X. “Ya no está en la ciudad de Oslo”, añadió sin más detalle.
Machado vivía en la clandestinidad tras denunciar fraude en las elecciones presidenciales de julio de 2024, que otorgaron un tercer mandato consecutivo al presidente Nicolás Maduro, ahora bajo presión de Estados Unidos.
La opositora, que estaba inhabilitada, sostiene que el chavismo le robó las elecciones a su candidato, Edmundo González Urrutia.
Machado, ganadora del Nobel de la Paz de este año por su lucha por “una transición justa y pacífica” para recuperar la democracia en Venezuela, llegó a la capital noruega en la madrugada del jueves 11 de diciembre.
Por algunas horas de demora, no arribó a tiempo para asistir el miércoles a la ceremonia de entrega del galardón, que había recogido en su nombre su hija Ana Corina Sosa.
Su viaje para salir de Venezuela fue fruto de una peligrosa operación denominada “Dinamita Dorada”, según Bryan Stern, un excombatiente estadounidense que fundó una empresa para sacar a extranjeros de zonas peligrosas.
Machado, disfrazada y con una peluca, abandonó Caracas rumbo a una playa en el norte del país. De allí salió en una precaria embarcación hacia Curazao, para tomar un vuelo con escala en Estados Unidos.
Stern detalló en declaraciones al Wall Street Journal que la embarcación que debía sacarla del país estaba averiada.
Para su salida se empleó un viejo barco pesquero, para que no fuera confundido con una narcolancha, ahora que Estados Unidos lleva semanas bombardeando este tipo de embarcaciones, con un saldo de más de 90 muertos en el Caribe y el Pacífico.
Cuando por fin logró zarpar, el GPS de la embarcación se dañó. Entumecida de frío y empapada, pasó a otro barco en el que se encontraba Stern y que la llevó a Curazao.
El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, dijo el mes pasado a la agencia AFP que Machado sería considerada “prófuga” si abandonaba el país, donde es investigada por “conspiración, incitación al odio y terrorismo”.
Según relató Bryan Stern, la operación “Dinamita dorada” atravesó dificultades extremas que causaron la lesión de Machado.
“Fue peligroso. Daba miedo”, narró Stern. El director del operativo recordó la oscuridad y el fuerte oleaje con los que tuvieron que lidiar para salir de Venezuela.
Stern dijo haberse encontrado con Machado en el mar. Ella abordó la embarcación que la esperaba para realizar una travesía de 13 horas hasta un lugar no revelado, donde tomó un avión. La misión, según CBS, fue planeada cuatro días antes de su ejecución.
“Las condiciones del mar eran ideales para nosotros”, ya que las grandes olas interfieren las ondas de los radares. “Pero desde luego no eran las que uno desearía para navegar”, explicó Stern.
“Era plena noche, había muy poca luz de luna, algo de nubosidad, poca visibilidad, las lanchas no tenían luces”, describió.
“Todos estábamos bastante mojados. Mi equipo y yo estábamos empapados hasta los huesos. Ella también, tenía frío y estaba muy mojada. Tuvo un viaje muy arduo. Estaba muy feliz. Estaba muy emocionada. Estaba muy cansada”, añadió el veterano de las fuerzas especiales.
Una veintena de personas participó en el operativo, según contó Stern.
El veterano indicó que la misión de sacar a Machado de Venezuela fue financiada por “unos cuantos donantes generosos”, todos privados.
“El gobierno estadounidense no contribuyó con un solo centavo a esta operación, al menos que yo sepa”, afirmó.
Sin embargo, señaló que su grupo se coordinó “de manera no oficial” con el ejército estadounidense para informarles de sus posiciones y evitar que les atacaran.
Machado declaró la semana pasada que contó con el apoyo de Estados Unidos para abandonar Venezuela.
La líder opositora ha dicho ya que pretende regresar a su país, aunque sin aclarar ni cómo ni cuándo.
Stern afirmó que su grupo no participará en esa operación, ya que solo se dedica a sacar a personas de los países, no a introducirlas.
“Eso es algo que ella debe determinar y decidir. Pero creo que no debería volver. Sin embargo, ella quiere hacerlo. María es realmente inspiradora”, afirmó.
Agencias AFP y AP


